martes, 10 de enero de 2012

Diferentes caminos.

No tengo idea de lo que va a pasar con mi relación, se me explota la cabeza y te puedo asegurar que me deshidrate de lo que llore.
Hay cosas que no las entiendo, te juro que no se, no tengo la mas mínima idea de lo que va a pasar, tengo miedo de tirar todo por la ventana. Ahora estoy tomando café y escuchando Adele, necesito relajarme porque creo que jamas sentí así de mal, sentir ese peso en tu cuerpo como si el mundo se cayera arriba tuyo y diga: 'Che, se te va ee'. 
Me gustaría tener la respuesta a la pregunta '¿ Que va a ser de nosotros?', '¿Que hacemos?' pero hay una pregunta no me anime a decirle, si él realmente es feliz conmigo. No se que contestara pero tampoco quiero escucharlo si es algo malo, prefiero que lo guarde en sus adentros o que se lo diga a otra persona como una comentario. 
Ayer, exactamente a las 4 de la mañana cuando corte de hablar por teléfono con él, sentí que el alma se me iba del cuerpo, no había remedio alguno que me hubiese calmado, no había almohada que soportara el peso de mis lagrimas sobre ella, no había nada.
Por eso mismo, opte por quedarme en mi cama tranquila, pensando en todo lo bueno que habíamos vivido juntos, tardes que no se comparan con nada de nada, eran geniales; y con eso acariciándome yo misma el pelo, me quede dormida. 
No fue una de mis mejores noches, ni tampoco fue uno de mis mejores sueños, me levante como si no hubiera dormido; la cabeza me daba vueltas y vueltas, mi estomago sin ganas de recibir comida pero si aceptaba un caliente y dulce café que me haga relajar, que pueda hacerme sentir un poquito de la dulzura del día aunque yo no lo notara. 
Y acá estoy, desahogándome un poco, tratando de meterle un poco de onda a la situación aunque mis ganas estén mas allá del piso. Como odio tener esta actitud de sentirme mal, de sentir un vació dentro mio. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario